
Sin dudas que este parque es lindo para ir a la mañana por una larga caminata alrededor del lago o quizás entre sus calles. Un agradable mediodía rodeada de naturaleza, ideal para meditar a la sombra de sus eucaliptus y árboles frutales o al rayo del sol de otoño. Una compañía de la familia más entrada la tarde para tomar unos mates mientras los niños juegan en los juegos o a la pelota. Ni hablar de la zona de parrilleros que viene genial cuando querés hacer una reunión con amigos o celebrar un cumple, con el lago de fondo como postal. Sin dudas que este parque es una bendición y es una de las maravillas que tenemos en Montevideo, cerquita de casa…






